Residuos Marinos. 2 Palabras. Hoy en día, malsonantes. Serán pocas las personas que en la actualidad no sepan su significado. Tal vez algunos estén familiarizados con deshechos marinos o simplemente con basura en el mar. El caso es, si tanta gente lo sabe, por qué tan poca actúa?
No es ningún mérito que este tema esté en la orden del día. De hecho, es una muy mala noticia. Sin embargo, deberíamos ser realistas y entender que, mientras 8 millones toneladas de desechos lleguen a los océanos cada año, vamos a tener que seguir conviviendo con este concepto. Solo depende de nosotros que lo queramos alargar.
Dentro del sector de los residuos marinos el protagonista es el plástico. Según un estudio de Green Peace, el “9% de todo el plástico que hemos producido y consumido hasta la actualidad a nivel mundial se ha reciclado, el 12% se ha incinerado, y la gran mayoría, el 79%, ha terminado en vertederos o en el medio ambiente.” Visto así, a nadie debería sorprenderle luego la existencia de la famosa “isla de plástico” o “sopa de plástico”, una zona del pacífico cubierta por basura que, des de 1988 fue descrita por primera vez por la National Oceanic And Atmospheric Administration.
La mayor parte del plástico está concentrado en 5 puntos del océano: Uno en el Índico, dos en el Atlántico y dos en el Pacífico. Estos puntos están a sobretodo formados por macroplásticos, mientras que entre un 21% y un 54% de todas las partículas de microplásticos del mundo se encuentran en la cuenca del Mediterráneo.
Todos estos datos alarmantes no tienen otro culpable que los humanos, el 80% de los residuos que encontramos en el mar provienen de tierra, mientras que el 20% restante de la actividad marítima. Y, mientras nosotros no nos damos cuenta a la infinidad de cosas que afectan nuestras malas acciones, tortugas, aves, ballenas y delfines seguirán muriendo ahogados y atrapados entre los escombros que nosotros no hemos querido reciclar.
Desde Blue Carbon queremos ser de aquellos que intentan poner un remedio a esta situación. Una situación que, como sea demasiado tarde, las consecuencias serán mucho peores.